Como os habréis dado cuenta, ya hemos dicho adiós a esa nueva época del año conocida como Veroño, y “por fin” podemos dar la bienvenida al otoño de verdad (al de toda la vida, vamos). ¿Y eso qué significa? Pues que, además de sacar toda nuestra ropa de abrigo e ir cambiándola por la que nos poníamos en junio, debemos empezar a protegernos igualmente la piel contra el frío.
El frío es uno de los elementos que más puede dañar la piel, y en esta época, donde las bajas temperaturas se empiezan a notar, es cuando se resaltan los pequeños defectos de nuestra piel, por lo que tenemos que tomar alguna precaución. El frío causa vasoconstricción en los capilares de la piel, los cuales se contraen haciendo que no llegue suficiente oxígeno ni nutrientes a las células de la epidermis, dejando un aspecto apagado y sin brillo a la piel (para saber más, podéis consultar este blog dermatológico del Doctor Bonillo).
¿Qué debemos hacer para proteger nuestra piel en estas circunstancias? A continuación desde LEA os comentamos lo necesario para mantener una epidermis lisa y cuidada en esta época del año…
Primera pista: si cuando piensas en proteger tu piel de los efectos que el frío provoca en ella, lo que se te viene a la mente es la siguiente opción….
Estás en el lugar indicado, porque, como idea original es perfecta, pero en términos de efectividad de protección real, nos apena deciros que no es la mejor opción. Así que, ¡no te pierdas nada de este post!
Lo más importante es la hidratación. Con la sequedad que provoca el frío, la piel necesita estar constantemente bien hidratada para que ésta esté en un buen estado. Pero no sólo es eso, sino que además debemos seleccionar la crema más adecuada para nuestra piel (grasa, sensible, mixta…). Para esta hidratación, nosotros os recomendamos la gama de cremas LEA, las cuales, protegen, nutren, y están adaptadas a cualquier tipo de piel.
Además, deberemos hacer algo tan sencillo como es limpiarnos la cara dos veces al día (una por la mañana, y otra antes de irnos a dormir), para así asentar el tratamiento de cuidado de la piel. Deberemos utilizar agua tibia para así conseguir eliminar las pieles muertas que acumulemos en la cara.
Por último, todo lo que nos rodea y hacemos, afecta de manera indiscutible a nuestra piel, siendo ejemplo de esto todo aquello que conforma nuestra dieta. En este contexto la frase “somos lo que comemos” se hace muy patente, ya que los excesos y la comida grasienta o picante no son buenos compañeros de una piel tersa y cuidada. Otra cosa que debemos incluir en nuestra rutina diaria es la necesidad de beber, al menos, dos litros de agua al día para así mantener un aspecto saludable y correctamente atendida.
Aunque, en este mes con aire de Movember, es necesario decir que…
Etiquetas: belleza, cremas, cuidado de la piel, frío, lea, otoño, piel, veroño
Deja una respuesta