Tomar el sol es muy importante tanto desde el punto de vista físico como desde el punto de vista psicológico. El sol reporta a nuestro organismo múltiples vitaminas que se traducen en bienestar. La luz solar también influye en nuestro estado anímico, los rayos de sol generan endorfinas que ayudan a aumentar nuestra felicidad. Es una actividad beneficiosa, agradable y placentera que a todos nos gusta practicar. Pero hay que tener cuidado, ya que puede ser muy dañino para nuestro organismo si no se toma con precaución y se cuida la piel con atención.
La radiación solar se diferencia en los rayos UVA, que afectan al interior de la piel, causando manchas y el envejecimiento prematuro de la misma y los UVB, que afectan al exterior de la piel y son los causantes de quemaduras y rojeces.
Los dos tipos de rayos pueden ser muy peligrosos para la salud de nuestra piel, sobre todo a largo plazo. Por ello debemos tener en cuenta que hay que cuidar nuestra piel en cada exposición al sol. Es importante tener en cuenta algunos consejos que nos ayudarán a prevenir daños y afecciones por un mal cuidado de la piel. La academia española de dermatología y publica un decálogo por estaciones sobre el cuidado de la piel donde podemos conocer la opinión de los expertos de primera mano:
– Es importante evitar la toma directa de sol entre las 10:00 y las 16:00 horas al ser estas las horas más fuertes del día.
– Utiliza siempre protector solar aunque la sensación térmica no lo requiera ya que la radiación siempre es más alto en verano.
– Utiliza una crema solar con base acuosa para no cerrar los poros y así será menos nociva para tu piel.
– Cuida tu hidratación bebiendo abundante líquido.
Tras el verano es importante continuar con los cuidados de la piel ya que ésta ha estado expuesta a los rayos ultravioleta durante un largo periodo de tiempo. No sólo debemos cuidar nuestra piel para prevenir enfermedades. Es importante cuidarla día a día para que luzca tersa durante más tiempo posible. Para ello hay que dedicarle una serie de cuidados y atenciones:
La exfoliación es el primer paso para eliminar las impurezas acumuladas en los poros de la piel a lo largo del verano. Este proceso debe realizarse una vez a la semana debido a que es muy agresivo. Dependiendo de nuestro tipo de piel, unas son más sensibles que otras, debemos escoger un exfoliante que respete nuestra piel lo máximo posible.
Limpiar la piel mediante leches limpiadoras es otro de los pasos imprescindibles para tener una piel sana. La leche limpiadora ejerce un efecto tanto de limpieza como revitalizante.
La hidratación es el paso fundamental para que la piel esté nutrida y por lo tanto luzca un aspecto sano y terso. Existen muchos productos hidratantes y dependiendo del tipo de piel deberemos hidratarla con uno u otro producto. No es lo mismo tener una piel grasa que una piel seca; el uso correcto de la crema hidratante es fundamental.
LEA tiene una gama de lociones y cremas que ayudan a nutrir e hidratar nuestra piel tras el verano. Por ejemplo, la gama Argán, más conocida como el oro líquido del desierto, es perfecta para pieles secas y deshidratadas gracias a sus propiedades nutritivas y suavizantes. Compuesta con ácidos grasos esenciales, vitamina E, manteca de Karité y glicerina, mejora la elasticidad de la piel, aporta suavidad y luminosidad, protegiendo del envejecimiento prematuro por su alto poder antioxidante.
Por su lado, la gama corporal de aceite de Oliva LEA, es aconsejable para todo tipo de pieles. Aporta los beneficios naturales del aceite de oliva, con excelentes propiedades hidratantes, antioxidantes y regenerantes. También contiene manteca de Karité, rosa mosqueta y vintamina E y B, que aportan un extra de hidratación y protección, consiguiendo que la piel esté cuidada cada día.
De esta forma, la opinión de los expertos sobre el cuidado de la piel arroja datos importantes que deberíamos tener en cuenta para prevenir enfermedades y cuidar nuestra piel con mayor eficacia. En el cierre del artículo de la dermatóloga Isabel Bielsa hay declaración sobre el cuidado de la piel con la siguiente afirmación que muchos obviamos o no tenemos presente:
“El uso de filtros solares no elimina los riesgos que comporta tomar el sol, sólo los disminuye”
Declaraciones como estas son las que nos hacen darnos cuenta que la piel es una parte importante de nuestro cuerpo que debemos cuidar con más atención.
Deja una respuesta